El BIM no es solo un software, sino un proceso que facilita la colaboración entre todos los involucrados en un proyecto utilizando modelos digitales. Para los fabricantes, el BIM ofrece la oportunidad de integrar sus productos directamente en los proyectos, lo que puede aumentar la visibilidad y la adopción de los productos al facilitar la especificación por parte de arquitectos e ingenieros.

Algunos de los software más populares incluyen Revit, ArchiCAD y SketchUp. La elección del software puede depender de las necesidades específicas del fabricante y de la compatibilidad con los clientes que utilizan estos modelos.

Los modelos BIM permiten incluir una amplia variedad de datos, no solo geométricos, sino también de rendimiento, como eficiencia energética y durabilidad. Esta información puede ayudar a los responsables de la toma de decisiones a elegir tus productos en lugar de otros competidores menos detallados.

Al adoptar el BIM, las empresas pueden destacar la innovación, la precisión técnica y la sostenibilidad de sus productos, mejorando la percepción de calidad y modernidad de la marca en el mercado.

El BIM permite que los fabricantes inserten sus productos directamente en los modelos de proyecto, aumentando la visibilidad de los productos entre arquitectos y diseñadores. Esto puede llevar a una mayor especificación de los productos y, en consecuencia, a un aumento en las ventas.